viernes, 5 de octubre de 2012

El amor

Yo no lo entiendo, y creo que jamás lo haré. No sé aún si este no estuvo hecho para mí, o yo para él. Pueda sonar absurdo que un muchacho a mi edad se pregunte esto, pero es que no creo haberlo sentido alguna vez. Tal vez he sentido un gran aprecio o ilusión, pero, ¿amor? Ni por mi querida madre.

No creo que sea un tacaño; simplemente, expongo lo que siento y creo, y digo que no he sentido el amor. Tal vez eso me haga un poco menos humano de lo normal, no estoy seguro. Pero, de lo que sí tengo certeza es de que en estos momentos de mi vida creo que nunca lo llegaré a probar.

Me han dicho todo tipo de cosas, desde que soy un chibolo inmaduro y egoísta hasta que soy un pesimista feo que nada quiere. No comprendo el enojo. ¿Acaso es antinatural decir que no se ha sentido el amor?, ¿es natural que todos los humanos del mundo lo sientan? No comprendo.

Me han recomendado, así mismo, que me relaje; que piense en otras cosas; que el amor llega cuando tiene que llegar; que freshee; pero, ellos no saben lo terrible y angustiante que me pone a pensar en eso. Me imagino mi proceso creativo. Estoy allí, sentado, conversando sobre algo, y de pronto viene la idea más genial del mundo. La puedo perder o no. Depende de dónde esté y si tengo papel. ¿Y si eso ocurriese con el amor?, ¿y si ya ocurrió?, ¿por qué carajo es tan impertinente y se muestra en las peores situaciones?

Es complicado todo esto, es confuso. No lo entiendo. Intento racionalizar algo irracional como dice un amigo. No lo sé. Es una fea noche, me iré a dormir.